Tras llegar a los 1000 muertos, los tiempos de duplicación de contagios se acortan y los positivos para coronavirus en la zona AMBA, no dejan de crecer. Por esta razón, el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, convocó a una reunión con el Gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof y su par de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, para consensuar lo que se descarta será un retroceso en la flexibilización de la fase 3 del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO).
Tras noventa días de ASPO, y tras haber logrado un desempeño, que se puede señalar como exitoso, la Ciudad de Buenos Aires relajó los controles y restricciones, hasta hacerlos inexistentes, lo que derivó en un mayor número de contagios que tuvieron su repercusión en el conurbano bonaerense, donde habita la mayor parte de la gente que trabaja en la Capital Federal.
En la última conferencia de prensa en la que estuvieron juntos los tres mandatarios, Rodríguez Larreta, flexibilizó las salidas deportivas permitiendo que decenas de miles de porteños, salieran a “ejercitarse”. Las “mareas humanas” que se vieron en esos días, sin respetar la distancia social, ni el debido uso de tapabocas, sumados a las flexibilizaciones comerciales, perfectamente explican el crecimiento de los casos en la Capital.
Pese al uso maniqueo que, el Ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quiróz, hizo de la cantidad de test en la Ciudad -reduciendo en un tercio los mismos-, logró mostrar una imagen que no se condice con la realidad: mostrar un nivel de “amesetamiento”, en la cantidad de nuevos casos. Antes había sido el cambiar la forma de registrar los enfermos, según su lugar de residencia y no de internación. Pero ninguno de esos “maquillajes” pudo esconder el creciente número de uso de terapias intensivas.
El llamado de atención realizado por el Gobernador Kicillof, que fue tomado como pesimista, al igual que las declaraciones del Ministro Gollán (“Con estos números no hay sistema que aguante”). Hoy se puede observar que el criterio sanitarista utilizado en la provincia advirtió sobre lo que se efrente al “bolsonarismo” expresado en la Ciudad. Los números son claros. Los números de contagios son idénticos, pero la ciudad tiene cinco veces menos población.
Fernández adelantó en una entrevista realizada al periodista, Roberto Navarro, que el encuentro servirá para “tomar una decisión” con respecto al ASPO. La reunión sucede siete días antes de la fecha estimada para informarle a la población del avance de la pandemia “Quedamos en vernos el lunes los tres” y aseguró que “Estamos en una situación muy complicada” en abierta referencia al 60% de ocupación de camas en el conurbano y un número similar en la Ciudad.
El viernes pasado, Ambos jefes provinciales, conformaron una mesa técnica que cubre las dos jurisdicciones con motivo de analizar la evolución diaria de la ocupación de camas hospitalarias, velocidad de la curva de contagios, circulación social e índice de mortandad en ambos distritos.
Si bien estos números, sean contagios como los fallecimientos, no son un número que pueda compararse ni con los vecinos países, ni con otras naciones que subestimaron la pandemia, el gobierno está resuelto a darle un corte al crecimiento de contagios y, ante el relajamiento de la zona AMBA y la inexistencia de controles en la Ciudad, la solución sea una vuelta foja cero. dependerá de muchos factores, pero la decisión del Presidente, no pasará de esta semana.